En medio del dolor por suicidas,
versos y palabras de amor
Los suicidios en Chañaral, con resultado de muerte o los intentos, muchas veces poco divulgados para no agravar el drama de las personas que atentan contra su vida, especialmente jóvenes, son como una espina permanente en el corazón imaginario de nuestra ciudad, con dos muertes a fines de junio y principio de julio.
Un joven de 34 años de edad, Williams Ventura González Díaz, (en la fotografía) se suicidó en la calle Atacama, en su propio hogar, de una apreciada familia de nuestra ciudad. No habría comunicado los motivos y aparentemente por un arranque emocional cuando se tomaba unas copas, según un familiar.
Eligió para la triste determinación la madrugada, dejando mucha tristeza en el hogar y en su legión de amigos y amigas, que era muy grande. Williams, “El Negrito”, también «Chiriwiri» como le decían sus amigos fue despedido con mucho dolor y en su tumba una carta pública, expresa el amor que le tenía, quien habría sido su polola, señalando en parte de la misiva: “Mi amor, te recordaré toda la vida (…) siento tanto dolor que todavía no asimilo que ya no estamos juntos. (…) Negrito de mi vida en el cielo nos juntamos, pero yo me demoraré un poco, sólo espérame ¡Ya! Te amaré siempre, Carla”.
En tanto, debido al paro de Gendarmería estaba en custodia en la 1ª. Comisaría de Chañaral el joven de 26 años de edad, Cristian Corona Veliz , quien se quitó la vida en un calabozo. Al igual que Williams González Díaz, se ahorcó (en la fotografía ).
La razón por la que estaba era una orden de detención y llevaba en la unidad policial dos días. Por razones humanas, debido a que no es el procedimiento tener tanto tiempo a un detenido le facilitaron una frazada, la cual habría utilizado para poner fin a su vida. ¿Gatillaría en su decisión el problema que originó que fuera detenido?... Atesoraba estos versos escritos por su amor: “Cuando te conocí tuve miedo de quererte/ cuando te miré tuve miedo de besarte/ cuando te besé tuve miedo de quererte/ y ahora que te quiero, tengo miedo de perderte”.
A Cristián también lo despidió una gran legión de seres queridos y amigos(as).
El suicidio, parecía que se iba en retirada, pero algo está faltando para evitar que la juventud tome estos caminos.
versos y palabras de amor
Los suicidios en Chañaral, con resultado de muerte o los intentos, muchas veces poco divulgados para no agravar el drama de las personas que atentan contra su vida, especialmente jóvenes, son como una espina permanente en el corazón imaginario de nuestra ciudad, con dos muertes a fines de junio y principio de julio.
Un joven de 34 años de edad, Williams Ventura González Díaz, (en la fotografía) se suicidó en la calle Atacama, en su propio hogar, de una apreciada familia de nuestra ciudad. No habría comunicado los motivos y aparentemente por un arranque emocional cuando se tomaba unas copas, según un familiar.
Eligió para la triste determinación la madrugada, dejando mucha tristeza en el hogar y en su legión de amigos y amigas, que era muy grande. Williams, “El Negrito”, también «Chiriwiri» como le decían sus amigos fue despedido con mucho dolor y en su tumba una carta pública, expresa el amor que le tenía, quien habría sido su polola, señalando en parte de la misiva: “Mi amor, te recordaré toda la vida (…) siento tanto dolor que todavía no asimilo que ya no estamos juntos. (…) Negrito de mi vida en el cielo nos juntamos, pero yo me demoraré un poco, sólo espérame ¡Ya! Te amaré siempre, Carla”.
En tanto, debido al paro de Gendarmería estaba en custodia en la 1ª. Comisaría de Chañaral el joven de 26 años de edad, Cristian Corona Veliz , quien se quitó la vida en un calabozo. Al igual que Williams González Díaz, se ahorcó (en la fotografía ).
La razón por la que estaba era una orden de detención y llevaba en la unidad policial dos días. Por razones humanas, debido a que no es el procedimiento tener tanto tiempo a un detenido le facilitaron una frazada, la cual habría utilizado para poner fin a su vida. ¿Gatillaría en su decisión el problema que originó que fuera detenido?... Atesoraba estos versos escritos por su amor: “Cuando te conocí tuve miedo de quererte/ cuando te miré tuve miedo de besarte/ cuando te besé tuve miedo de quererte/ y ahora que te quiero, tengo miedo de perderte”.
A Cristián también lo despidió una gran legión de seres queridos y amigos(as).
El suicidio, parecía que se iba en retirada, pero algo está faltando para evitar que la juventud tome estos caminos.
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